Los Medias Rojas de Boston dicen que el locutor y ex jugador de nudillos Tim Wakefield está recibiendo tratamiento por una enfermedad que no especificaron y pidieron a los fanáticos que respeten su privacidad después de que su ex compañero de equipo Curt Schilling revelara su enfermedad sin su consentimiento.

El equipo emitió un comunicado el jueves después de que Schilling dijera en un podcast que Wakefield tenía cáncer cerebral, lo que provocó un gran apoyo a Wakefield y críticas a Schilling. Los Medias Rojas señalaron que estaban publicando el comunicado con el permiso de Wakefield y su esposa, Stacy.

“Desafortunadamente, esta información se compartió públicamente sin su permiso”, dijo el equipo. “Su salud es un asunto profundamente personal que pretendían mantener en privado mientras navegan por el tratamiento y trabajan para abordar esta enfermedad. Tim y Stacy agradecen el apoyo y el amor que siempre se les ha brindado y respetuosamente piden privacidad en este momento”.

Wakefield, de 57 años, se retiró en 2012 con un récord de 200-192 y una efectividad de 4.41 en más de 3.000 entradas en las Grandes Ligas. Formó parte de los campeonatos de la Serie Mundial de 2004 y 2007 de Boston y fue incluido en el Salón de la Fama del equipo en 2016.

Ha trabajado para NESN, la cadena de transmisión de los Red Sox, desde 2012 y permaneció activo en organizaciones benéficas de Boston, incluida la Red Sox Foundation.

Schilling, quien fue compañero de equipo de Wakefield de 2004 a 2007, se retiró en 2009. Trabajó como analista de ESPN antes de ser despedido en 2016 por publicaciones anti-transgénero en las redes sociales. Otras publicaciones han expresado apoyo al linchamiento de periodistas y a la insurrección del 6 de enero. Su empresa de videojuegos, 38 Studios, quebró y no cumplió con un préstamo de 75 millones de dólares del estado de Rhode Island.

A Schilling le diagnosticaron cáncer de garganta en 2014 y luego dijo que estaba en remisión. Fue consagrado en el Salón de la Fama de los Medias Rojas en 2012, pero no llegó a ser incluido en el salón nacional de béisbol en 2022, su último año de elegibilidad, obteniendo el 58,6% de los votos, muy por debajo del 75% necesario.